Devolviendo lo robado (WH09)

Montañas centrales

Una partida sin riesgos

Tras el fracaso de la partida anterior decidí hacer una partida más tradicional pero segura: Las indicaciones de Griselda llevarían a los PJs a una llanura en el interior de las Montañas Centrales donde había un dungeon que deberán explorar pero, en el lugar, se encontrarán con problemas.

Es el mismo esquema que la partida del valle de los gatos, pero también es un esquema que funciona y en el que era poco probable que me dieran problemas.

Además, esto me permitió reciclar algún elemento no usado en partidas anteriores, como la entrada tras la cascada del valle de los gatos.

La partida

La partida tenía dos ramas principales. Antes de llegar verían señales de que había habido un combate y, en caso de investigar, un PNJ les pediría ayuda para rescatar a los suyos, que habían sido secuestrados por los orcos. Si accedían, este PNJ les ayudaría a encontrar el dungeon.

En caso de que evitaran el lugar del combate o rehusaran ayudar al pobre PNJ, deberían investigar la llanura encontrando una serie de pistas que les llevarían al dungeon. En este segundo caso correrían el riesgo de encontrarse con patrullas de orcos.

Fueron buenos y ayudaron al PNJ, así que la partida transcurrió sin problemas por el camino corto: el PNJ cumplió su palabra, les ayudó a encontrar el dungeon, y la partida seguía con los PJs adentrándose en él y descubriendo que las criaturas que construyeron ese dungeon y otros que han explorado ya un par de veces están vivas, ¡existen! (Lo que abre nuevas posibilidades).

En el encuentro, las criaturas les han exigido el escarabajo de oro que Molotova llevaba desde hacía varias partidas. Con la devolución del objeto la maldición de la cicatriz de Molotova desaparece, así como el daño que produjera (pero no la cicatriz misma), cerrando este arco.

La partida termina con los PJs huyendo de los orcos tirando abajo un puente en el más puro estilo Indiana Jones y el templo maldito, lo que les ahorró un desagradable encuentro a la noche al retrasar a sus perseguidores.

Planos y guión de la partida

Como siempre, a continuación dejo el guión de la partida, en el que se incluyen los planos de la llanura, del dungeon y las pistas que les dio Griselda.

Combate contra cuatro orcos… y sí, son orcos, ¿alguien no lo ve claro?
Plano de la llanura
Uno de los planos del dungeon

Cariño, he encogido a los PJs (WH08)

Middenheim

Nuevo jugador

Como ya conté, la cuarentena de 2020 nos encerró en nuestras casas, pero eso no fue motivo para dejar de jugar así que, decidmos jugar on line y por videoconferencia. El caso es que el amigo que me dio materiales en Avilés, cuando vio que jugábamos on line quiso apuntarse así que… ¡tenemos jugador nuevo!: Albert Burninghall.

El principal problema era cómo engancharlo a la partida. Decidí que sería el alquimista al que Griselda enviaría a los demás jugadores para comprobar la pureza de la pieza recuperada en el valle de los gatos.

Esto, además, daba una posibilidad que me pareció muy interesante: hacer que los jugadores tuvieran información asimétrica e intereses contrapuestos, así que para empezar la partida, les puse a regatear precios entre ellos. ¿Fue muy cruel por mi parte poner al nuevo jugador, que no conoce al grupo, enfrentado al resto de jugadores? Quizá sí. ¿Me importa? Desde luego que no.

Reducidos

Durante la prueba de pureza la Piedra Bruja (el material del que estaba hecha la pieza a recuperar) hizo de las suyas y redujo a todos los PJs a una décima parte de su tamaño.

La solución al problema estaba en un hechizo que Albert podía conjurar, pero para el que necesitaba ingredientes que estaban en un sótano secreto que no quería que nadie conociera Así, la partida debería ser recorrer la casa hasta encontrar cómo entrar al sótano.

Partida fallida

Mi idea era que subieran al desván, donde daba el respiradero del sótano. Necesitarían cuerdas para el descenso, cuerdas que deberían recoger en otras estancias (p.e. hilo de bramante para atar cartas en el cajón del escritorio, hilo de costura en el cajón del armario ropero…) . Para dirigirlos por el buen camino contaba con la ayuda del gato, ratas, cucarachas y un búho que, además servirían para darle un poco de emoción al asunto.

Sin embargo, no conseguí que el gato les hiciera salir de la trastienda. De hecho, se libraron de él sin grandes problemas y lograron llegar hasta el resorte de la falsa biblioteca que escondía una puerta. Visto que habían acortado, decidí dejarles entrar por un agujero de ratas tras el fondo de la falsa biblioteca.

Visto en retrospectiva, me doy cuenta de que no había necesidad de facilitarles nada: la puerta era demasiado pesada para ellos y deberían encontrar otro camino, lo que les debería haber llevado al desván, a descubrir que necesitaban cuerda… y a seguir la partida que tenía pensada.

Una pena, porque había creado unos materiales muy bonitos con dibujos de las distintas estancias para que las recorrieran.

En resumen, una partida emocionante para la que, como máster, no estuve a la altura y resultó bastante decepcionante, sobre todo para lo que tenía pensado. 🙁

Planos y guión de la partida

A continuación dejo los planos y el guión de la partida. Los planos son los de la vivienda, con secciones y vistas de las estancias. Hay también descripciones de la vivienda con un breve inventario de lo que pueden emplear (podrían haber empleado).

Plano de la casa
Sección de la casa
Vista del desván con el hueco del respiradero en el suelo, a la izquierda

Comandos de guerra

Nuevo juego

Pues hemos aprovechado la cuarentena para empezar un nuevo juego: Comandos de guerra, un juego sobre la Segunda Guerra Mundial. Una de las jugadoras habituales es profesora de instituto y lo usa para enseñar el periodo a sus alumnos, así que ha decidido masterizarnos las partidas que usa en clase.

En la partida éramos soldados alemanes y una civil checa que debían averiguar qué estaban tramando los serbios en el Danubio.

Conseguimos infiltrarnos detrás de las líneas enemigas y, tras dividir el grupo, logramos averiguar que lo que pretendían eran arrojar bloques de hormigón para reducir el calado del río e impedir que fuera empleado por los alemanes como vía de transporte.

Fue una primera partida en la que, lo más importante, era ir tomando contacto con el juego, así que la máster fue bastante amable y generosa, sobre todo teniendo en cuenta el desastre de misión que planificamos.

Pese a todo, conseguimos averiguar las intenciones de los serbios y avisar a tiempo a nuestro ejército para que la Luftwaffe hiciera su trabajo y destruyera las instalaciones serbias.

El nuevo juego
Jugando la partida on line