Este fin de semana nos hemos reunido en una casa que la familia de uno de los jugadores tiene cerca de Huesca para hacer algo de turismo y una barbacoa rolera en la primera reunión presencial desde que comenzó el confinamiento.
Turisteando
Estuvimos haciendo un poco de turismo por la zona: un pequeño paseo hasta una ermita rupestre dedicada a San Cristobal, ver los Mallos de Riglos y sobre todo, visitar algo del románico de la zona: San Pedro el Viejo en Huesca, el castillo de Loarre (donde se rodaron algunas escenas de El reino de los cielos, de Ridley Scott) y el monasterio de San Juan de la Peña, un lugar espectacular.
Soy un gran fan del románico, y también lo eran otros miembros del grupo (gente de buen gusto), así que son visitas que hemos disfrutado.






Barbacoa… ¡y gatos!
Además de turistear estuvimos haciendo una barbacoa y jugando con los gatos de la casa, en especial con un par de gatitas jóvenes que se pasaban el tiempo corriendo, jugando, subiéndose a los árboles y, en general, teniéndonos bastante paciencia, porque estábamos todo el rato llamándolas para jugar con ellas.


Roleando
La partida de rol la jugamos al principio en el jardín, pero pronto pasamos al salón de la casa, en un antiguo molino.


Pero a la partida de rol en sí mejor le dedico una entrada propia.